Certificado energético, ¿cómo se hace?
Se sabe que el certificado energético es obligatorio tanto para vender como para alquilar la vivienda pero ¿en qué se fija el certificador cuando visita el inmueble? en contra de lo que muchas personas piensan, no se fija ni en la iluminación de la casa, ni en los electrodomésticos. lo más importante es la orientación de la vivienda, las ventanas y las instalaciones de calefacción, aire acondicionado y agua caliente
muchas personas piensan que el tipo de iluminación o el tipo de electrodoméstico que hay en la vivienda influyen a la hora de elaborar el certificado energético. pero es una creencia falsa. lo que se valora en este documento son los siguientes elementos:
– la fachada de la vivienda: al certificador le da una idea del año de construcción del inmueble y le permite conocer la altura de la casa
– patrón de sombras: el certificador se fija si hay elementos como árboles o edificios en frente que hacen sombra en la vivienda objeto de estudio. también es importante conocer la orientación de la casa porque “esto influirá en la necesidad de calor o frío en la época en la que estemos”, señala abel navarro, coordinador del área de desarrollo de negocio de sociedad de tasación
– medición de la casa: se mide la vivienda y se mira la disposición de las fachadas, paredes y el número de ventanas. también se tiene en cuenta el tipo de cerramiento de las ventanas. “podemos tener una vivienda de 100 m2 pero con 5 m de fachada y ésta provoca que perdamos o ganemos calor”, recuerda navarro
– ver las instalaciones: el certificador se fija en la calefacción, el aire acondicionado y el agua caliente sanitaria porque estos factores influyen en la pérdida o ganancia de energía en una vivienda
– dar información sobre las instalaciones: el propietario de la vivienda debe de facilitar, en la medida de lo posible, información sobre el tipo de aparato de calefacción o refrigeración de la casa para ver el consumo que tienen, eficiencia, etc.
una vez hecha la toma de datos de la vivienda, el técnico los analiza y los introduce en los programas informáticos habilitados para hacer el cálculo simplificado de la certificación energética. “el certificado es un resumen que ofrece datos en forma de calificación de la “a” a la “g””, recuerda navarro
el siguiente paso es llevarlo al registro de la comunidad autónoma donde se encuentre ubicada la vivienda. cada ccaa es diferente en cuanto a la gestión del registro. algunos son presenciales, otros son online. la persona que lleva el certificado al registro puede ser el propietario o el técnico. lo que se obtiene es la etiqueta energética donde aparece la calificación, los kilogramos de co2 emitidos y la demanda energética
por último, el fin del certificado energético es que el técnico proponga mejoras para el usuario de la casa que van encaminadas hacia una mayor eficiencia energética. “el técnico propone cambios sencillos como por ejemplo poner toldos en aquellas ventanas orientadas al oeste, cambiar el sistema de calefacción o las ventanas.
idealista.com